El dominio de la luz a través del vidrio, bien para tamizar y embellecer la que nos entra del exterior, para dividir estancias, así como para preservar la intimidad del hogar, ha sido una preocupación que desde hace muchos años ha encontrado una solución idónea en el vidrio mateado al ácido, que ha sabido actualizar sus diseños con propuestas idóneas en la arquitectura actual.